lunes, 4 de noviembre de 2019

Invitemos al balance y
la paz en la Tierra
que tanto merecemos todos.
Queremos disolver los patrones
destructivos entre nosotros
para que todos nosotros,
hombres y mujeres
puedan unirse con amor y poder.
Me inclino profundamente
ante el divino masculino
que se necesita en esta Tierra
tanto como el divino femenino.
Honro tu poder
tu claridad
tu firmeza
y tu concentración...
...Y asimismo tu vulnerabilidad,
tu ternura y tu dolor:
honro tu coraje de estar ahí con ambos,
y eso es lo que realmente me atrae.
En realidad,
amamos vuestra energía
amamos la danza entre
lo masculino y lo femenino.
Por siglos,
las mujeres os han
abusado y castrado
como las madres que abusan
del amor incondicional de sus hijos
en vez de lidiar honestamente
con la falta de amor en sus propias parejas.
Le damos al ego masculino
lo que quiere, para obtener lo que nosotras
queremos, en vez de pedirlo con honestidad.