Invitemos al balance y la paz en la Tierra que tanto merecemos todos.
Queremos disolver los patrones
destructivos entre nosotros
para que todos nosotros,
hombres y mujeres
puedan unirse con amor y poder.
Me inclino profundamente
ante el divino masculino
que se necesita en esta Tierra
tanto como el divino femenino.
Honro tu poder
tu claridad
tu firmeza
y tu concentración...
...Y asimismo tu vulnerabilidad,
tu ternura y tu dolor:
honro tu coraje de estar ahí con ambos,
y eso es lo que realmente me atrae.
En realidad,
amamos vuestra energía
amamos la danza entre
lo masculino y lo femenino.
Por siglos, las mujeres os han abusado y castrado como las madres que abusan del amor incondicional de sus hijos en vez de lidiar honestamente con la falta de amor en sus propias parejas.